Ya ha comenzado a rodar el balón en el famoso “grupo de la muerte” ( La verdad que los periodistas se las apañan siempre para inventar un grupo de la muerte o partido del siglo cada mes). En este primer partido se han enfrentado Rumanía y Francia, que han terminado empatando a cero en un partido con poquísimos tiros a puerta.
Era casi inevitable que el marcador acabara como empezó.
Francia lo intentó algo más, pero el resultado final es justo y lógico en un partido que tiene poco que contar. Los franceses están pasando una transición difícil tras la retirada de Zidane y la decadencia de algunos jugadores clásicos como Thuram y Vieira (ahora lesionado). Para terminar de estropearlo faltó también Henry, quedando únicamente Ribery (qué buen jugador) para dar el do de pecho, ante la inconsistencia de Malouda. Es una selección que parece perder personalidad. Enfrente estaba Rumanía, un combinado con la típica mezcla de veteranía y juventud, en la que parece mayor el peso de jugadores experimentados como Chivu y Contra. Más preocupados de no perder que de ganar, dejaron solo a Mutu en la delantera, con lo que éste poco pudo hacer.
Fiel a su historia, los rumanos tienen pocas posibilidades de destacar.
Era casi inevitable que el marcador acabara como empezó.
Francia lo intentó algo más, pero el resultado final es justo y lógico en un partido que tiene poco que contar. Los franceses están pasando una transición difícil tras la retirada de Zidane y la decadencia de algunos jugadores clásicos como Thuram y Vieira (ahora lesionado). Para terminar de estropearlo faltó también Henry, quedando únicamente Ribery (qué buen jugador) para dar el do de pecho, ante la inconsistencia de Malouda. Es una selección que parece perder personalidad. Enfrente estaba Rumanía, un combinado con la típica mezcla de veteranía y juventud, en la que parece mayor el peso de jugadores experimentados como Chivu y Contra. Más preocupados de no perder que de ganar, dejaron solo a Mutu en la delantera, con lo que éste poco pudo hacer.
Fiel a su historia, los rumanos tienen pocas posibilidades de destacar.
Mucho van a tener que espabilar ambos equipos para buscar el segundo puesto del grupo, si se confirma lo que se vio en el partido siguiente de Italia y Holanda.
Es posible que los dos entrenadores, Donadoni y Van Basten, al darse la mano antes del partido, recordaran por un momento aquellas combinaciones entre ambos que cambiaban el curso de un partido. La derecha mágica de Donadoni sirviendo un balón al genial delantero centro, que anticipándose siempre a la defensa, cabeceaba o chutaba al fondo de las mallas. Perdonad este comienzo, pero buscad si podéis (no es fácil encontrarlo en España) algún vídeo de aquel maravilloso Milan de finales de los 80. Eso es fútbol de verdad. Como el que Holanda hizo después.
Italia llegaba, como siempre, con la vitola de favorito. No en vano es la campeona del Mundo e impone respeto. Pero se encontró con un equipo con una idea muy clara: podemos ganarles si hacemos nuestro juego y paramos al cerebro contrario. Y así lo hicieron, tejiendo con Engelaar, de Jong, Van der Maart y cualquiera que pasara por allí, una tupida que red que impidió a Pirlo dar un pase a derechas, hasta que tuvo que bajar casi hasta su área para recibir el balón.
Holanda terminó con las dudas con el gol de Van Nistelrooy, en una jugada de delantero centro nato. Un gol legal, pese a las protestas de los contrarios. Italia intentó igualar, pero no daba miedo al tener a Pirlo desconectado. Y si había algún resquicio ahí estaba Boulahrouz haciendo el partido de su vida. Para colmo de males (o de bienes), Holanda enganchó una jugada preciosa, un contraataque bárbaro, donde Van Bronckhorst, Kuyt y finalmente Sneijder, consiguen uno de los goles más bonitos (seguro) de esta Eurocopa,
En la segunda parte Italia salió a por todas, intentando llevar el partido a su terreno, luchando, chocando y evitando el toque de los jugadores naranjas. Pero no encontró nunca su sitio en el campo, con Gatusso más pendiente de la bronca que de subir el balón. Su mejor oportunidad fue una falta lanzada muy bien por Pirlo, pero también Van der Saar tenía su noche. Y el partido finalizó con otro golazo al contragolpe de un brillante Gio Van Bronckhorst.
Italia se vio sorprendida por un rival que le pilló a la contra y no necesitó tener mucho tiempo el balón para crear peligro. En cierto modo Holanda hizo esta vez de Italia, machacando el partido en los momentos decisivos, pero con una brillantez de la que carecen normalmente los transalpinos. Por problemas físicos, no hubo dúo Cannavaro – Materazzi, siendo éste último también sustituído y pasando un gris Panucci a jugar de central. La defensa ni se enteró de la velocidad de los aviones holandeses, el medio campo ni creó ni destruyó, y en el ataque Luca Toni estuvo más solo que la una. Voy a permitirme una broma: el mejor italiano fue Valentino Rossi, como pudisteis ver el domingo, con su carenado azzurro y el balón-casco. Este tío sí que es la pera y da gusto verle. ¡Ah, se me olvidaba! Con sus 29 años hubiera sido el tercero más joven de su equipo.
Holanda ha vuelto. A los amantes del buen fútbol nos gustó mucho su partido. A por todas chavales, hasta encontraros con España. Y que sea, antes que nada, un partidazo. Y que gane quien gane (ojalá España), lo haga bien, porque ya estoy cansado de la famosas historias de lo-importante-es-el resultado y no- me- importa -ganar- de- penalty -injusto- en- el- último- minuto.
Italia llegaba, como siempre, con la vitola de favorito. No en vano es la campeona del Mundo e impone respeto. Pero se encontró con un equipo con una idea muy clara: podemos ganarles si hacemos nuestro juego y paramos al cerebro contrario. Y así lo hicieron, tejiendo con Engelaar, de Jong, Van der Maart y cualquiera que pasara por allí, una tupida que red que impidió a Pirlo dar un pase a derechas, hasta que tuvo que bajar casi hasta su área para recibir el balón.
Holanda terminó con las dudas con el gol de Van Nistelrooy, en una jugada de delantero centro nato. Un gol legal, pese a las protestas de los contrarios. Italia intentó igualar, pero no daba miedo al tener a Pirlo desconectado. Y si había algún resquicio ahí estaba Boulahrouz haciendo el partido de su vida. Para colmo de males (o de bienes), Holanda enganchó una jugada preciosa, un contraataque bárbaro, donde Van Bronckhorst, Kuyt y finalmente Sneijder, consiguen uno de los goles más bonitos (seguro) de esta Eurocopa,
En la segunda parte Italia salió a por todas, intentando llevar el partido a su terreno, luchando, chocando y evitando el toque de los jugadores naranjas. Pero no encontró nunca su sitio en el campo, con Gatusso más pendiente de la bronca que de subir el balón. Su mejor oportunidad fue una falta lanzada muy bien por Pirlo, pero también Van der Saar tenía su noche. Y el partido finalizó con otro golazo al contragolpe de un brillante Gio Van Bronckhorst.
Italia se vio sorprendida por un rival que le pilló a la contra y no necesitó tener mucho tiempo el balón para crear peligro. En cierto modo Holanda hizo esta vez de Italia, machacando el partido en los momentos decisivos, pero con una brillantez de la que carecen normalmente los transalpinos. Por problemas físicos, no hubo dúo Cannavaro – Materazzi, siendo éste último también sustituído y pasando un gris Panucci a jugar de central. La defensa ni se enteró de la velocidad de los aviones holandeses, el medio campo ni creó ni destruyó, y en el ataque Luca Toni estuvo más solo que la una. Voy a permitirme una broma: el mejor italiano fue Valentino Rossi, como pudisteis ver el domingo, con su carenado azzurro y el balón-casco. Este tío sí que es la pera y da gusto verle. ¡Ah, se me olvidaba! Con sus 29 años hubiera sido el tercero más joven de su equipo.
Holanda ha vuelto. A los amantes del buen fútbol nos gustó mucho su partido. A por todas chavales, hasta encontraros con España. Y que sea, antes que nada, un partidazo. Y que gane quien gane (ojalá España), lo haga bien, porque ya estoy cansado de la famosas historias de lo-importante-es-el resultado y no- me- importa -ganar- de- penalty -injusto- en- el- último- minuto.
Próxima jornada, el viernes: Rumanía-Italia y Holanda-Francia.
ARTÍCULO REALIZADO POR GATTAMELATA.
ARTÍCULO REALIZADO POR GATTAMELATA.
1 comentario:
Buenísimo artículo.
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